Por la emergencia sanitaria y económica derivada del Covid-19, Colombia ha adoptado diferentes medidas que buscan una estabilidad nacional. Sin duda alguna, uno de los gremios que más se vio a afectado fue el de los arrendatarios, bien sea de inmuebles comerciales o de vivienda. Según un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el 34% de las viviendas que existen en Colombia son para alquilar, mientras que el promedio en América Latina es de 21%.
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Según datos del Dane y cálculos de la Lonja de Propiedad Raíz de Medellín y Antioquia y en cuento a la división geográfica, este es el mayor porcentaje de familias que viven en arriendo por departamentos:
- Risaralda: 44%.
- Bogotá: 43,4%.
- Meta: 43,1%.
- Quindío: 39,8%.
- Cundinamarca: 39,5%.
- Valle del Cauca: 37,3%.
- Antioquia: 36,9%.
Y según la Federación Colombiana de Lonjas de Propiedad Raíz, más del 34% de los colombianos vive en arriendo, el 76% de la oferta de vivienda en el país se encuentra en estratos de clase medias, 22,2% en estrato dos; 26,2% en estrato tres; y, por último 22,8% en estrato tres.
Esto quiere decir que el negocio del arrendamiento se mueve cerca de $28 billones anualmente, teniendo en cuenta que esta cifra puede fluctuar, primero por el ajuste anual en los cánones y por factores como la inversión extranjera en inmuebles para el arriendo, además que es un ingreso para muchas familias, es decir, para muchos colombianos, el arriendo es la manera de generar sus ingresos mensuales, bien sea con inmuebles con destinación comercial y/o habitacional.
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¿Cómo afectó el Covid-19 el bolsillo de los arrendadores y arrendatarios?
El sector de arrendamientos y el inmobiliario del país se vieron altamente impactados por esta situación que nos tomó a todos por sorpresa, la inmensa mayoría de los contratos de arrendamiento en Colombia tanto para vivienda como para inmuebles comerciales, son los que se han afectado de manera directa.
En solo Bogotá, según cifras de Hacienda Distrital, las viviendas en arriendo generan cánones de $10 billones, el 58% corresponde a hogares con ingresos inferiores a cuatro SMLMV, y 31% a hogares de menos de dos SMLMV.
Según Fedelonjas, el 35% de los contratos de locales llegaron a acuerdos de pago, por lo que hay opiniones divididas ante nuevo decreto, pero un gran porcentaje se vio en la obligación de no cancelar el canon de arrendamiento o de cerrar sus pequeños comercios, hecho que afecto a la economía de los arrendadores y arrendatarios.
El 4,2% de los tenderos en Colombia cerró sus negocios durante la primera quincena de abril como consecuencia del impacto generado por el coronavirus, además desde que inició la emergencia sanitaria hasta el mes de mayo la Superintendencia de Sociedades recibió solicitudes de 68 empresas para iniciar procesos de reorganización y liquidación, y de 90.000 restaurantes, han sido 22.000 los que han cerrado sus puertas.
Aunque el Decreto 579 para arriendos tenía vigencia hasta el 30 de junio del presente año, son muchas las recomendaciones para que el bolsillo del arrendador y arrendatario no se vea afectado, como lo mencionó la Doctora María Alejandra Pérez, Directora Jurídica de la Lonja de Propieda Raíz de Antioquia: “cuando se termine esta sustitución, la gente seguirá necesitando inmuebles, la reactivación de la economía exige la utilización de los espacios comerciales para la prestación de los servicios“.
Además la Doctora María Alejandra, explico sobre el reajuste del canon de arrendamiento que se aplazó hasta el 30 de junio, en consecuencia al Decreto 579, “concluido el aplazamiento establecido, el arrendatario pagará las mensualidades con el reajuste anual correspondiente en los cánones que hagan falta para terminar el periodo contractual acordado, incluyendo el valor porcentual de los incrementos no cobrados durante el periodo comprendido de la vigencia del decreto”.
Es decir, si en mayo tenía el incremento del canon de arrendamiento, se suspendió y si el aumento era de 100.000 pesos, se cobrarán 200.000 pesos de los meses en los que no se cobró en esos meses que acobijó el decreto, pero se pagarán en los meses que hagan falta para la finalización del contrato.
Es importante resaltar que durante la cuarentena y la vigencia de este decreto, no se suspendió el pago del canon de arrendamiento, lo que se acordó fue un aplazamiento del pago del canon de los meses que cubría el decreto.
¡Recomendaciones para no olvidar!
Aunque el Gobierno Nacional ha desarrollado diversas estrategias para que este impacto no incremente, son muchas las recomendaciones para que esta la crisis no siga afectando el bolsillo del colombiano de a pie, pero la más importante es que debes tener en cuenta que puedes empezar hacer una renovación modificando los contratos de arrendamiento, reduciendo proporcionalmente el precio del arriendo o modificando su plazo de duración.
No olvides que esto se debe hacer teniendo en cuenta un mutuo acuerdo.
Además, aunque no se sabe a ciencia cierta cuándo terminara esta situación, recuerda que siempre habrá una luz de esperanza, será la compra de vivienda la principal acción para la reactivación económica, no solo para las empresas, si no para los trabajadores que hacen parte de esa obra; en la compra de vivienda no solo te beneficias tú, sino que estás ayudando a muchas familias que hacen parte del gremio constructor.
Recuerda que siempre será un buen momento para la inversión de vivienda nueva y estás son las visiones de algunos expertos a nivel nacional:
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Por: Julián Ballén
Un comentario
Quiero tener vivienda propia vivo n Pereira grAcias x la atención tengo nieto y hermana descapacitada d 69 años y 15